lunes, 8 de agosto de 2011

Mortaja


Se va marchitando mi vida,
se va secando mi alma.

Las gotas del cielo emprenden el gris descenso
y en el suelo rememoran el eco de los ángeles caídos.

Místico coma,
te vivo con conciencia,
el despertar es desespero,
y el vivir es tormento.

Portales invisibles yacen en el bosque
el cadavérico ejército protege mi tumba.
Canta el búho, duerme el lobo y llora el buitre,
mis manos crean penumbra.

El león degollado, envuelve mi espalda,
la negra obscuridad quiere desparecerme
putrefacto y quieto, reposo en mis sábanas.